Por: O. Aliaga
Somos poco creyentes en las elecciones políticas, porque las impone un sistema caduco y son manejadas por personajes de la derecha que lo único que tienen limpia es la banda sedeña que cae sobre su pecho inflamado por la corrupción.
Hasta ahora, la democracia y las elecciones libres, no pueden dar un gobernante correcto, transparente y pulcro.
El tipo de democracia con la que nos engatusan no queremos porque el poder es solo para los ricos y bergantes.
No obstante nuestro escepticismo y pese al escozor que nos producen los comicios, instrumento de la democracia, podemos avizorar una pequeña y azulada luz al final del túnel. Esa pequeña luz alienta nuestra esperanza a veces ingrávida y casi siempre opacada.
Decimos esto porque en las próximas elecciones municipales y regionales del 03 de octubre del presente año se presenta como candidato para la alcaldía de Sucre un amigo nuestro: virtuoso, capacitado y de profusa inteligencia. Nos referimos al ingeniero Secundino Silva Urquía.
Secundino nació en el cercano y exótico caserío de La Quinuilla, es de origen humilde y campesino, sus padres son agricultores; Sucre es su pueblo adoptivo desde muy pequeño, exalumno y premio excelencia del colegio San José e integrante de la promoción sanjosefina 1977 “Clorinda Matto de Turner”.
Ingresó a la facultad de ingeniería de la Universidad Nacional de Cajamarca. En la Universidad afloró el bicho de la política, que lo llevaba metido en el costado izquierdo de su corazón y con el apoyo de un amplio sector de universitarios ganó la dirigencia estudiantil.
De esa universidad cajamarquina egresó con el título de Ingeniero Civil. Tiene post grados de la Pontificia Universidad Católica del Perú, Instituto CESAP-Colegio de Ingenieros del Perú y de la Decana Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
Profesionalmente se desempeñó como Ingeniero Consultor; ha trabajado en instituciones estatales como: ENACE, BANMAT, Gobiernos Regionales y municipalidades de la costa, sierra y selva; en ONGs como Médicos sin Fronteras- Bélgica; en empresas constructoras como: J.E. Construcciones Generales SAC, Emulsiones Asfálticas del Brasil – BRASEM SAC, etc. Actualmente es Gerente General de la empresa constructora ESGI CONTRATISTAS GENERALES SRL.
Como candidato a la alcaldía tiene propuestas coherentes y realizables que llevarán al quietismo y estancamiento de Sucre un viento de renovación y modernización en temas de la salud, educación, de protección del medio ambiente y en los campos de la comunicación, ejes principales para el desarrollo de nuestra tierra, acorde con los tiempos de cambios tecnológicos que en nuestra tierra casi no se ven.
El pueblo de Sucre nuevamente ha sido elegido con el milagro de tener un candidato de fuste. Creemos que en ésta vez el sermón de la montaña “bajará por La Quintilla”.
Dado sus conocimientos del aquelarre político y de su vasto entendimiento de la ley de elecciones municipales, cumplirá con lo estipulado por la normativa de la ley de municipalidades 26864. Cabe si recomendarle al candidato Secundino que tenga mucho cuidado al escoger su Cuadro de Regidores porque muchos lobos se le acercarán disfrazados de corderos.
Al estallido de las campañas comiciales, muchos potenciales candidatos están desempolvando sus disfraces y ensayan discursos embusteros para engañar al electorado sucrense y tenderle zancadillas al candidato Secundino. Advertimos esto para que el elector no se deje aupar por las promesas de candidatos falsos que lo único que quieren es tener una fuente de ingresos y una oportunidad para enriquecerse ilícitamente. El currículo de esos probables candidatos que el pueblo ya los conoce es como un prontuariado y tienen el alma mala y las manos sucias.
En contraste la hoja de vida de Secundino nos revela a un hombre correcto, recto, lúcido, conocedor y experimentado.
Ahora que Secundino Silva es candidato a la alcaldía de Sucre, su talento, su calidad de profesional eficiente, su personalidad firme, su condición de hombre con valores, le hacen digno de toda honra.
Queremos creer que el pueblo sucrense es digno de Secundino, porque si no triunfa, solo queda para Sucre el desdoro de tener como sus representantes en el municipio a hombres de baja estofa. Pueblo de Sucre: el talento y la honradez glorifican, es preciso elevar a los que brillan, y Secundino es digno de toda elevación.
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