Aproximaciones a la obra teatral de
GRÉGOR DÍAZ
Por Jorge Horna Chávez
Uno de los componentes del arte auténtico es despertar en el
espíritu de los seres humanos la reflexión sobre sí mismos y el entorno social.
Los textos teatrales como parte de la literatura, cuando se
traducen en arte escénico nos conducen a la abstracción, pues el desempeño de
actores y actrices bajo el cuidado del director o directora de teatro, además
de las técnicas de iluminación y sonido, logran reflejar un aspecto de la
realidad cotidiana.
Por fortuna, he asistido a algunas puestas en escena de las
obras de Grégor Díaz.
En el auditorio de la Biblioteca Nacional en Lima, en el
ciclo: El autor peruano en escena, el 29 de setiembre de 2004, se presentó la
obra El buzón y el aire de nuestro genial paisano. La puesta en escena estuvo a
cargo del grupo Proyecto uno con la actuación de Luisa García y Ever Morante,
con la acertadísima dirección de Sara Joffré.
El buzón y el aire es una pieza breve en la que se desarrolla
el tema de la incomunicación entre los individuos, con un lenguaje poético y
realista. Se inscribe en el cómo transcurre nuestra existencia. El drama de los
habitantes de las grandes urbes, visto desde dos perspectivas: la lucha por la
sobrevivencia dentro de los abismos de las desigualdades sociales, y las ansias
de libertad en un mundo mejor y armónico al que aspiramos todos.
Otra de sus piezas teatrales, Sitio al sitio, fue
escenificada por el grupo de teatro Renacer, en el local de la Asociación de
Artistas Aficionados (A.A.A.), en julio de 2005. Los seres marginados de la
ciudad están representados por Folleque y Lechuza, cuyo lugar de “trabajo” es
la calle, vigilando en la noche automóviles estacionados; la Cri-cri, es una
joven procedente de una familia pobre, que urgida por las necesidades
materiales se dedica a la prostitución callejera; Ganzúa, es un ladronzuelo
envilecido; el Policía, que arremete, chantajea y exige “cupos”.
Ellos luchan por la vida, asediados por la violencia
cotidiana y la indiferencia y prepotencia del poder establecido; sin embargo no
renuncian a su derecho de seres humanos.
Grégor Díaz no soslayó jamás su compromiso de forjar un
teatro que toca las fibras más sensibles de la sociedad, en su afán de
descifrar las dificultades y las soluciones alternativas desde su propia raíz.
Este dramaturgo es amado y reconocido por destacados directores, directoras,
actores y actrices de del arte dramático de nuestra patria.
JOSÉ GRÉGOR DÍAZ DÍAZ (Celendín, 1933 – Lima, 2001)
—Estudió en la Escuela Nacional de Arte Escénico.
—Realizó perfeccionamiento becado en El Teatro Experimental
de la Universidad de Chile.
—Fue Director y profesor del Club de Teatro de Lima.
—Obtuvo el 1er. Premio en el concurso de obras de teatro
organizado por la Asociación Judía del Perú (1978), por su obra Los del 4.
—Premio Teatro Universitario de San Marcos (1979)
—Premio Nacional de Dramaturgia (1988)
—Los del 4 fue publicada en la antología de Teatro
hispanoamericano en Madrid (1971)
—Su obra Sitio al sitio fue publicada en Colombia en la
antología Teatro Breve Social (1999)
—Además escribió ensayos, entre ellos: 30 años de dramaturgia
en el Perú
OBRAS:
Cercados y Cercadores/ Clave 2 manan / Con los pies en el
agua / Cuento del hombre que vendía globos / El buzón y el aire / El mudo de la
ventana / El que espera en el balcón / Electra / Espumante en el sótano /
Gregor vs, Gregor / Harina mundo / La huelga / La noche anuncia la aurora / La
pandorga / La señora de los geranios / Los del 4 / Los ojos del mundo / Me
quiero casar / Réquiem para 7 plagas / Sin ton ni son / Sitio al sitio / Valsecito
del 40 . / Chimbote mundo.
EL REALISMO SOCIAL
DEL DRAMATURGO GRÉGOR DÍAZ

Grégor Díaz Díaz nació en Huacapampa (distrito
de José Gálvez) el año 1931, falleció en Lima el año 2001. Su extensa obra
dramática que escribió ha sido acogida y representada por diversos grupos
teatrales.
El domingo 20 de marzo de este año, asistí a espectar la
puesta en escena de la obra Cercados y cercadores, en el local
de la Casa de la Literatura Peruana;
los actores integran “El Cuadro Teatro”.
En el volante que se distribuyó esa noche se lee: “Grégor Díaz es un reconocido autor teatral
peruano que captó la atención de connotados directores, actores y actrices a
finales de la década de los 60 e inicios de los 70, y su vigencia sigue en pie,
por el tono de denuncia que caracteriza sus piezas.
En cada una de
las obras que han sido escritas por este autor celendino se evidencia la
denuncia, la protesta y la solidaridad con los marginados y desposeídos. En
esta oportunidad y gracias al auspicio de La Casa de la Literatura, se presenta la obra Cercados y cercadores
(1971)”.
Cercados y cercadores tiene como motivación las
circunstancias por las que atraviesan hombres y mujeres desocupados, que no
hallan trabajo en el país; el chantaje a las jóvenes mujeres de los soberbios
empresarios; la discriminación por la edad, raza, idioma, estrato social,
etcétera, es la característica oprobiosa del sistema capitalista salvaje (el
calificativo es del Papa Juan Pablo II), hoy denominado neoliberalismo.
El contenido de los dramas que escribió Grégor Díaz
expresan el anhelo de una sociedad sin explotados ni explotadores, sin mendigos
ni adoradores del dinero, sin individualismos y egoísmos. Un mundo donde la
justicia social sea pan de cada día, humanismo e igualdad de oportunidades. Es
un teatro comprometido con las penurias del pueblo, que refleja la realidad
social de nuestra patria y las esperanzas de un cambio cuyos protagonistas
serán aquellos que por centurias han heredado la pobreza y marginación.
Jorge Horna
Lima, 21 de marzo de 2011
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