Publicado el Lunes, 17 Agosto 2015 22:29
Algo deja en claro de nuevo para quienes aún se sienten aislados y desolados si no entran en las izquierdas establecidas por miedo a ser calificados y señalados por pertenecer a las derechas que desestabilizan: No hay que escoger entre dos opciones que no lo son! Hay que hacer algo muy distinto: OPTAR por la revolución, por la transformación, por la emancipación, por la vida, por la libertad, por la justicia, por la Pachamama. Quienes marchan en Ecuador optaron y CARAJO!! no están solos y solas. QUE NO ESTÉN SOLAS Y SOLOS. Necesitan no estar solos y solas. Nos están desafiando a caminar su palabra desde donde estemos. De una vez por todas, vamos a decirle NO MÁS a toda la burocrática estalinista práctica reenganchada que nos prohibe la lucha y ponerle el pecho al sistema porque son ellos los que mandan. Ellos y todos los que señalan a las y los marchantes como desestabilizadores de derecha, ni siquiera han mirado la agenda del levantamiento. No lo van a hacer. Ni siquiera han notado que la derecha y los medios comerciales nada dicen de la marcha---¿si fuera una desestabilización de la CIA, no estaría en las primeras páginas y titulares?
Correa es y ha sido un agente del sistema que se robó NUESTRO (y nuestro es nuestro, no es el de las izquierdas establecidas) CAMINAR LA PALABRA, lo mismo que las mafias indígenas, insurgentes y "populares" que organizan aparatos para insertarse en el régimen para "defender sus conquistas", es decir al capitalismo, porque si no, perderían lo que han conseguido luchando contra eso que defienden. No más carajo, No más. Qué tristeza da ver compas salir a maniobrar en la cerca para estar con la izquierda de ellos y seguir en la lucha nuestra contra el sistema! . Si estamos tan solos y tan asilados ¿quién carajo son los miles que marchan ahora en el Ecuador, o los zapatistas, o nosotras y nosotros?
“…¿La derecha estará metida en esto? ¿Cuál derecha si ya se están apropiando de nuevo de todos estos gobiernos "progresistas" con corruptelas que obviamente nada comparable al patético caso venezolano, pero donde obviamente también empiezan a "quebrarse las patas" gobierno "revolucionarios" cada vez más manejados por las fusiones cómplices entre las oligarquías bancarias y empresariales y los altos funcionarios gubernamentales? Pero, claro, existe una derecha nominal y formalizada electoralmente que debe estar feliz –hasta cierto punto– con esta impresionante movilización ya que en teoría la refuerza electoralmente y le quita a Correa, como se la quitó a Chávez en el momento del referéndum constituyente, la posibilidad de reelección indefinida. Angustia central de todas las ambiciones caudillescas desde nuestra independencia hasta ahora; en su contraparte, terror de todas las oligarquías a la figura histórica del "caudillo popular". Pero en realidad estas son movilizaciones que desbordan tanto a la derecha oficial y formal en forma de partidos como los oportunismos y agentes traidores que puedan existir dentro del movimiento popular e indígena…”
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