Opinión libre: SUCRE: REFLEXIONES EN TORNO A LAS PASADAS ELECCIONES MUNICIPALES. (PARTE I).

 Por Secundino Silva Urquía

·         SUCRE: REALIDAD Y ALTERNATIVA:
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Han pasado suficientes días, desde el 03 de octubre del 2010, en que todos los distritos del Perú eligieron a sus autoridades ediles para el período 2011- 2014. Los resultados, en el caso del distrito Sucre- Celendín, son ya harto conocidos e inevitablemente nos inducen a reflexionar y a comentar.

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 Haber sido actores en la campaña electoral y tener un percance con nuestra propuesta política, no nos impide ser objetivos en torno a lo sucedido, más aún si se toma en cuenta, que días antes declaramos que “para nosotros llegar a la Alcaldía no es un fin supremo,  sino un medio para llegar a la conciencia de nuestros pueblos e iniciar el proceso de integración y verdadera transformación de nuestro distrito”. Así lo reiteramos en el volante díptico que contenía nuestro plan de gobierno y que fue distribuido entre la gente de la ciudad capital, centros poblados y caseríos, en cuya introducción dice lo siguiente: “SUCRE, desde su creación como distrito, tuvo un desarrollo que lo llevó a ser considerado como el más productivo y progresista de la provincia celendina. Este logro que se dio, gracias al trabajo tesonero y mancomunado de sus pobladores del campo y la ciudad, solo duró hasta los primeros años de la década de los setentas. A partir de esta etapa y durante los últimos cuarenta años, gobiernos municipales centralistas y carentes de visión de futuro, descuidaron a su proceso de relativa integración. Construyeron la carretera Sucre_Oxamarca sin tomar en cuenta la necesaria conexión vial de la ciudad capital con sus caseríos. Años después se hizo bien en construir algunas trochas carrozables que unen caseríos y centros poblados, pero con la limitación de no tomar en cuenta a la ciudad capital.

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Por ésta falta de planificación y de visión de futuro, los caseríos de la altura, se vincularon directamente con la capital provincial y departamental; y luego crearon su propio mercado en Cruzconga. Así, la ciudad de Sucre, ya sin interacción con sus caseríos más productivos, perdió su dinamismo económico y comercial, llegando a su estado actual de aislamiento geopolítico y económico; y el distrito, a uno de estancamiento y desintegración. Peor aún, durante los últimos veinte años, las cinco últimas gestiones ediles, descuidaron la atención de algunos caseríos limítrofes con La Encañada; consecuentemente sus pobladores perdieron la identidad sucrense y optaron por pertenecer a ese distrito, con el consecuente peligro de pérdida definitiva de nuestro territorio.
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… El FRENTE REGIONAL… se ha propuesto: llegar a la conciencia de los sucrenses, sumar sus voluntades y esfuerzos;  asumir la gran tarea de revertir su situación actual, de reconstruir su identidad e integración; y de devolverle su condición de pueblo Líder en la provincia celendina”. 
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·         ALGUNAS RAZONES PARA EL PERCANCE  DEL FRENTE REGIONAL:
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 —Falta de mayor presencia en la jurisdicción del distrito.- Era el reclamo de la gente, aunque estuvimos más de un año en campaña y en los últimos meses permanecimos en Sucre. Sin embargo, algunos observan que ésta no es razón de peso para perder la elección, pues el ganador no vive en Sucre sino en Celendín. No falta quien opina que para enfrentar a la magnitud de los problemas de Sucre, se necesita a alguien con preparación y visión de futuro adquiridas, incluso, durante vivencias en el extranjero.
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—Falta de mejor organización.- Nuestro Comité político no alcanzó a formar Comités de Apoyo en todos los barrios de la ciudad capital, ni en todos los Centros Poblados (CCs. PPs.) y caseríos del distrito.
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—Falta de simpleza en el discurso para llegar al elector del campo.- Me considero un hombre autocrítico. Por tanto a esto lo asumo plenamente.
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   —La división del voto en la ciudad y en el campo.- El elector de Sucre, se identifica con un candidato por sus propuestas, pero también por familiaridad, o a partir del lugar de su nacimiento y/o vivencia. El ganador de la contienda del 03 de octubre, se apoyó en su familiaridad con electores de un CC.PP.; y el aspecto económico de su campaña lo basó en donativos de la Municipalidad de Celendín, presentándolos a los pueblos como su propia gestión; una forma muy sutil de hacer campaña con el dinero del pueblo, por la que la próxima gestión celendina debe investigar al Sr. Juan de Dios Tello.
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 —Proliferación de candidatos.- La incursión a última hora de Wilson Zavaleta desde la ciudad de Sucre; y de Porfirio Bazán, Luis Alvarado, y Hernando Zelada desde los caseríos, dividió a los electores de ambos medios, restándonos votos y posibilidades. Razón por la cual se sabe que Fernando Chávez, les está muy agradecido a los candidatos mencionados.

  —Ausentismo, confusión y deficiente orientación a los electores.- Hubo ausentismo, de los más de tres mil electores registrados en el padrón electoral, apenas votaron dos mil cuarenta y ocho, más de mil electores no votaron.
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De otro lado, en Sucre ganamos las elecciones regionales y también las municipales para la provincia. En el distrito hubo más opción para el voto preferencial, ya que entre otras razones, Acción Popular no tenía candidato provincial. Sin embargo nuestros personeros reportaron varias cédulas en blanco de las elecciones municipales, que indicaba la confusión de varios electores, al momento de votar. Así la diferencia de votos nuestra con el ganador es de apenas 149 votos.

·          DOBLE DISCURSO Y PROMESAS, COMO TÁCTICA DE CAMPAÑA ELECTORAL:
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Desde el candidato ganador hasta el que quedó penúltimo, basaron su estrategia de campaña en la realidad del distrito desintegrado y dividido del que somos parte; y su táctica fue usar un doble discurso y prometer sin medida, en sus presentaciones ante la población. Así, en la ciudad capital prometieron de todo, ignorando intencionalmente a los caseríos y centros poblados; y cuando llegaban a éstos, prometían también el oro y el moro, cuidándose de no mencionar a la ciudad capital. 
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Es decir, que para nuestros contendores y muchos de sus seguidores, ya nada se puede hacer con la realidad de Sucre, salvo “practicarle parches” o “suministrarle calmantes”. Entiendo más ahora porqué el Sr. Wilson Zavaleta, candidato de A.P, que para muchos sucrense representaba una esperanza, y para nosotros a la corriente política más tradicional y conservadora; me dijo en una conversación breve que tuvimos a inicios de junio, en el aeropuerto de Cajamarca: “Que unir a la ciudad capital del distrito con sus caseríos y centros poblados de la altura era ya un imposible”. A partir de entonces lo tuve más claro que no solamente nuestra respectiva posición política; sino también nuestro conocimiento, ideas y propuestas con relación a Sucre, eran abismalmente diferentes. Aquí está la respuesta a la pregunta de muchos sucrenses que decían o dicen ¿Porqué no se unieron Wilson y Secundino? Si alguna duda quedara analicemos solo una de las propuestas que Wilson Zavaleta plantea demagógicamente para nuestro distrito: “La construcción de un mercado de abastos en la ciudad de Sucre”; lo hace sin explicar quiénes irían a comprar y vender allí, ni qué productos se expenderían; y sin proponer ninguna obra adicional y complementaria, como la carretera que permita el traslado más breve hacia ése futuro centro comercial, de la población económicamente activa y sus productos. Lo anterior es como proponer la construcción de un elefante blanco, observación ésta última, que no es nuestra, sino la de un internauta sucrense que la hizo con cierta mofa, en el portal de internet denominado FORO SUCRE.
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Hablando de promesas en una situación como la del distrito Sucre, son más quienes prefieren a aquellas que den solución a sus propios problemas o a los de momento, y son menos los que piensan en el futuro de los pueblos o en el de las generaciones venideras. Hubieron promesas que mostraron la desesperación del candidato y causaron risa a los electores. Por ejemplo: La de poner movilidad diaria y gratuita, ida y vuelta, a  todos los estudiantes de los caseríos que estudien en el colegio San José de Sucre y en otros. Otra es la construcción de un comedor en el Colegio César Vallejo de Calconga, para brindar desayuno y almuerzo gratuitos a todo el alumnado y población en general; alguien habría dicho  “para qué ya vamos a trabajar”. Otra es la de construir un reservorio por cada propietario de una parcela, para la “cosecha del agua” y aplicación del riego tecnificado. Esto último que es necesario, es viable solo si se trabaja con organizaciones de propietarios, para que el beneficio sea común y no individual; además de aclarar que solo se cosecha lo que se siembra; al agua no se cosecha, sino se capta. 
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En plena campaña, simpatizantes de nuestro frente político, nos sugerían usar las mismas tácticas de los contendores. Es decir, nos pedían usar también el doble discurso, y prometer para competir en igualdad de condiciones, en el terreno de la demagogia o mentira. Desde luego, dijimos ¡NO!, optamos por una conducta política principista, porque representamos a una corriente progresista de cambio, y estábamos allí para difundir y sembrar las ideas en las que creíamos y creemos. 
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Del percance de la propuesta que más le convenía y conviene, el pueblo  sucrense sacará su mejor lección.